Banco del Bajío

Historia y evolución

Banco del Bajío nació en 1994 en León, Guanajuato, corazón de una de las regiones industriales más dinámicas de México. Desde el primer día abrazó un modelo de banca de cercanía con el tejido productivo del Bajío —automotriz, cuero-calzado, agroindustrial y manufactura— con el objetivo de financiar el crecimiento real de empresas y cadenas de suministro.

Con el tiempo, la institución amplió su cobertura nacional y diversificó soluciones para todos los eslabones de la cadena de valor (proveedores, anclas y distribuidores). Un hito clave fue su oferta pública inicial en 2017 en la Bolsa Mexicana de Valores, evento que robusteció su capital, profesionalizó aún más su gobierno corporativo y aceleró su agenda digital.

La combinación de conocimiento regional, disciplina de riesgo y ejecución ágil ha permitido a Banco del Bajío consolidarse como uno de los bancos de capital mexicano más relevantes, con una trayectoria de crecimiento sostenido y rentabilidad consistente.

Modelo de negocio

Productos y servicios principales

• Cuentas de depósito: cheques, ahorro y nómina para personas físicas y morales, con herramientas de conciliación, dispersión y control de saldos.
  • Esquemas de cash management para empresas con operaciones multi-sucursal.
  • Soluciones de cobranza y referenciación para automatizar ingresos.
• Créditos: financiamiento empresarial y PyME (capital de trabajo, equipo, activo fijo, comercio exterior), además de créditos personales, hipotecarios y automotrices.
  • Soluciones para cadena de suministro: factoraje, confirming y vendor financing.
  • Esquemas especializados por industria (agro, automotriz, logística, inmobiliario y energía).
• Servicios de inversión: fondos de inversión, pagarés e instrumentos de renta fija, así como banca patrimonial con asesoría basada en objetivos, horizonte y tolerancia al riesgo.
  • Portafolios diversificados y alternativas de liquidez para tesorerías empresariales.
• Banca electrónica: banca en línea y móvil para personas y empresas, con autenticación fortalecida, permisos por rol y autorización multinivel.
  • Pagos SPEI/TEF, impuestos, dispersión de nómina y plantillas de pagos recurrentes.
  • Notificaciones en tiempo real y tableros de control para tesorería.
• Servicios de tesorería y pagos: administración de liquidez, transferencias nacionales e internacionales, pago a proveedores y cobranza de servicios.
  • Comercio exterior: cartas de crédito, cobranzas documentarias y garantías.
  • Soluciones de adquirencia y aceptación de pagos en punto de venta y e-commerce.

Segmentos de clientes objetivo

• Empresas medianas y grandes: industrias con alta integración de proveedores y exportación (industrial, comercial y agroindustrial).
• PyMEs en expansión: compañías que requieren liquidez, equipo productivo, digitalización de cobros y servicios integrales.
• Personas físicas (con y sin actividad empresarial): soluciones de ahorro, inversión, crédito y patrimonial que acompañan su ciclo de vida financiero.

Canales de distribución

• Red de sucursales con presencia en el Bajío y en regiones estratégicas del país, apoyadas por gerentes de relación especializados.
• Plataformas digitales (web y móvil) para operar 24/7 con seguridad de nivel bancario.
• Centros de atención y mesas especializadas en tesorería, comercio exterior y banca empresarial.

Participación de mercado y posicionamiento competitivo

Banco del Bajío es una de las instituciones de capital mexicano más relevantes. De acuerdo con cifras de la CNBV a 2024, se ubica entre los primeros seis bancos del país por cartera de crédito. Su propuesta se diferencia por banca relacional, conocimiento sectorial y agilidad para estructurar soluciones a la medida —atributos especialmente valorados por empresas y cadenas productivas.

Estrategia y diferenciadores

• Enfoque regional con alcance nacional: profundo entendimiento del Bajío y su ecosistema productivo, replicando mejores prácticas en otras regiones.
• Especialización empresarial: productos por industria, soporte de tesorería y comercio exterior, y soluciones de cadena de suministro que fortalecen capital de trabajo.
• Innovación digital: plataformas seguras, procesos paperless y analítica para acelerar originación, servicio y toma de decisiones.
• Solidez financiera: capital y liquidez robustos que permiten crecer con prudencia y resiliencia a lo largo del ciclo económico.
• Atención personalizada: gerentes de relación y equipos especializados que acompañan al cliente desde el diagnóstico hasta la ejecución.

Gobierno corporativo

Principales accionistas

Tras su OPI, la estructura accionaria es de capital disperso con participación de grupos empresariales mexicanos y fondos institucionales nacionales y del exterior. Al cierre de 2023, en torno a un 30% permanece en manos de inversionistas fundadores y el resto circula en el mercado.

Consejo de administración

Integrado por empresarios, especialistas financieros y consejeros independientes, en línea con las mejores prácticas de la BMV y la CNBV. El consejo es presidido por Salvador Oñate Ascencio, fundador de la institución, y opera mediante comités como Auditoría, Prácticas Societarias, Riesgos y Remuneraciones, reforzando controles y transparencia.

Política ESG

El banco integra criterios ambientales, sociales y de gobernanza en su operación: financiamiento responsable, inclusión financiera, educación financiera, apoyo a proyectos productivos sostenibles y sólidos estándares de integridad. Publica reportes de sostenibilidad y avanza en metas medibles de ecoeficiencia y diversidad.

Aspectos regulatorios

Opera bajo supervisión de la CNBV y la Ley de Instituciones de Crédito, cumpliendo con Basilea III en capital, liquidez y gestión de riesgos. Participa en el IPAB, lo que brinda cobertura a depósitos conforme a la normativa vigente, y mantiene estrictos esquemas de prevención de lavado de dinero y financiamiento al terrorismo (PLD/FT).

Clientes y reputación

Reconocido por su servicio cercano y su orientación a resultados para el sector productivo, Banco del Bajío ha construido relaciones de largo plazo con empresas del Bajío y de otras regiones estratégicas. Los clientes destacan tiempos de respuesta ágiles, flexibilidad en la estructuración y calidad de atención, atributos que han sido respaldados por evaluaciones y publicaciones especializadas del sector financiero.